Mesón Atalaya
Hicimos una escapada a uno de los pueblos más bonitos de Andalucía, Zuheros. Con un gran y hermoso castillo, unas calles angostas y unos paisajes merecedores de un Oscar.
Entre paso y paso, buscábamos ese bar típico dónde se come lo esencial y lo tradicional del pueblo. Hay varias opciones pero nos decantamos por Mesón Atalaya. Un mesón acogedor con una pequeña terraza que fue dónde nos sentamos.
Preguntamos por algún vino de la zona y nos dieron una sorpresa con Piedra Luenga, de Bodegas Robles. Un vino bio de color cereza oscura, aromas frutales, notas a yogur y muy suave.
De entrante nos pedimos una tabla de quesos de la zona. Una variedad de quesos curados de oveja y cabra, acompañado de membrillo casero y un chorrito de aceite de oliva extra de la casa. Todo estaba tremendo.
Seguimos con un excelente estofado de ciervo con patatas fritas. Una salsa reducida con vino y una carne de caza que quitaba el sentido. Para chuparse los dedos!!
Finalizamos con unos cafés y una tarta de queso casera. En pocos sitios te ponen una tarta de queso en condiciones, hemos probado muchas y esta estaba cremosa y con un sabor intenso a queso.
Estar en la sierra es una maravilla, tanto por los paisajes como por su gastronomía. Nos alegra encontrar lugares como este mesón y disfrutar de su cocina. Indispensable probar la tabla de quesos, te deja con la boca abierta.
0 Comentarios