Galletas sin gluten y sin lactosa: receta fácil y crujiente
¿Te apetece preparar unas galletas caseras sin gluten y sin lactosa que además estén riquísimas? Esta receta es ideal para cuando te apetece algo dulce pero sin complicaciones ni ingredientes raros.
Con solo unos pocos ingredientes y 30 minutos de tu tiempo, tendrás unas galletas que crujen al morder y se deshacen suavemente en la boca. Vamos paso a paso como si estuviéramos en tu cocina charlando.
¿Qué harinas usar para hacer galletas sin gluten?
Una de las claves para lograr una buena textura es elegir bien las harinas. No todas las harinas sin gluten funcionan igual, pero aquí usamos una combinación que aporta sabor y estructura sin complicaciones.
- Harina de arroz: neutra, ligera y fácil de conseguir.
- Maicena: aporta suavidad y ayuda a ligar la masa.
- Harina de almendra (opcional): da un toque de sabor y mejora la textura.
💡 TIP: Puedes usar una mezcla comercial sin gluten tipo «Mix repostería» si ya la tienes. Si la masa queda quebradiza, añade una cucharadita de goma xantana o psyllium.
Ingredientes básicos para unas 15 galletas medianas
Todos los ingredientes son sin gluten y sin lactosa.

Asegúrate de comprobar las etiquetas, especialmente en el caso de los chips de chocolate si decides añadirlos.
- 100 g de harina de arroz
- 50 g de maicena
- 30 g de harina de almendra (opcional)
- 1 huevo L
- 80 g de azúcar (blanco, moreno o de coco)
- 60 g de margarina vegetal o aceite de coco
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
- 1/2 cucharadita de levadura química
- 1 pizca de sal
- Opcional: chips de chocolate, coco rallado, canela o ralladura de limón
Cómo hacer galletas sin gluten y sin lactosa paso a paso 🧑🍳
Te explico cómo prepararlas de forma sencilla y sin batidora. Solo necesitas un bol, una cuchara y tus manos. ¡Más fácil imposible!
- Precalienta el horno a 180 °C con calor arriba y abajo.
- En un bol, mezcla bien las harinas, la levadura, la sal y el azúcar.
- Añade el huevo, la margarina derretida (no caliente) y la vainilla. Mezcla hasta formar una masa homogénea y suave.
- Si usas chips o frutos secos, incorpóralos ahora.
- Forma bolitas del tamaño de una nuez, colócalas en una bandeja con papel vegetal y aplástalas ligeramente.
- Hornea durante 12–15 minutos o hasta que los bordes estén dorados. No las hornees de más o quedarán duras al enfriar.
- Déjalas enfriar sobre una rejilla. Al sacarlas del horno estarán blandas, pero endurecen al enfriar.
¿Se pueden hacer sin huevo?
Sí, y quedan muy bien. Puedes sustituir el huevo por una de estas opciones:
- 1 cucharada de semillas de chía molidas + 3 cucharadas de agua (dejar reposar 10 min)
- 3 cucharadas de compota de manzana natural
- 1 plátano maduro pequeño, triturado
Estas opciones cambian un poco el sabor y la textura, pero son totalmente válidas si quieres una receta 100 % vegana o sin huevo.
¿Qué textura tienen estas galletas?
Estas galletas quedan crujientes por fuera y un poquito tiernas por dentro, sobre todo el primer día. Gracias a la mezcla de harinas y a la grasa vegetal, no quedan secas ni harinosas. Y al no llevar lácteos, son más ligeras y digestivas.
💡 TIP: Si te gustan más crujientes, hornéalas 2 minutos más y guárdalas sin tapar. Si prefieres textura más blanda, añade 1 cucharada de bebida vegetal a la masa.
Variantes para no aburrirse nunca 🍫
Una vez tengas la receta base, puedes personalizarla como más te guste:
- Con chips de chocolate negro sin lactosa
- Con ralladura de limón o naranja
- Con especias como canela o jengibre
- Con frutos secos picados
- Con coco rallado para una versión más tropical

¿Cómo conservar las galletas caseras?
Guárdalas en un recipiente hermético a temperatura ambiente hasta 5 días. Si hace calor, puedes refrigerarlas, pero déjalas volver a temperatura ambiente antes de comer. También puedes congelarlas en bolsas tipo zip, ya cocidas o crudas (mejor sin levadura).
¿Son aptas para niños?
¡Totalmente! Estas galletas son perfectas para meriendas escolares o para hacer con los peques. Al no tener alérgenos comunes como leche o gluten, son seguras para muchas dietas especiales. Y como se hacen en pocos pasos, pueden ayudarte en la cocina.
Una receta básica que se vuelve imprescindible 💛
Estas galletas sin gluten y sin lactosa no son solo para personas con intolerancias: son para cualquiera que quiera disfrutar de un dulce casero, más saludable y sin complicarse. Puedes hacerlas para un té, para llevar al trabajo, o como tentempié rápido.
¿Te animas a prepararlas? Cuéntame qué combinación has hecho, y si las compartes… ¡mejor aún! La cocina sin alérgenos también puede ser un placer diario.
